A lo largo de la historia se han descubierto diferentes enfermedades que afectan el rendimiento y la vida de los deportistas. Hoy quiero contarles de una en especial que ha afectado a muchos patinadores, El Síndrome de Burnout. Este se presenta en el momento en el que el deportista se siente fatigado, no tiene el mismo interés por realizar buenos entrenamientos, y mucho menos una buena competencia.
El deportista, y en especial los patinadores presentan distintas facetas:
1- La despersonalización, es cuando nos empezamos a alejar, a ser distantes e indiferentes con nuestro grupo de compañeros y entrenador.
2- Se da una dismunución en las sensaciones del logro personal, el deportista no se siente motivado con su deporte, piensa que todos los esfuerzos que realiza son en vano y no tienen ningún resultado.
3- Aislamiento, busca alejarse completamente de los entrenamientos, se encuentra con baja autoestima y no cree en su capacidad como deportista.
4- Extenuación emocional o física, es el punto extremo en el que el deportista no siente ningún deseo de competir, alejándose totalmente del deporte y presentando enfermedades físicas como resfriados y/o lesiones corporales.
Es muy común que en los procesos deportivos se presente este síndrome, pues todo deportista presenta desniveles emocionales con la actividad que realiza y lo que gira alrededor de ella, ya sea su entrenador, su vida social, estudio, trabajo, familia, entre otros. En la historia del patinaje hemos y seguimos viendo muchos y claros ejemplos de biografías de distintos patinadores que nos motivan a dar un paso a delante y seguir luchando cada día por lo que queremos, entre estos encontramos a :
Daniel Arriola: varias veces campeón Argentino, Sudamericano y 9 veces tercero en el mundo.
En estos casos es importante saber llegar con calma a la solución de los problemas y poder tener un excelente rendimiento deportivo.
Ahora yo invito a todos los deportistas que nos cuenten sus experiencias acerca de este tema!
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